¿Acepto usted a Jesus como su salvador?

martes, 4 de agosto de 2009

Tiempos Peligrosos



Profecía: TIEMPOS PELIGROSOS

Rusia acusa a Georgia y pone en alerta sus tropas en Osetia Sur
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Rusia anunció hoy que ha puesto en alerta sus tropas emplazadas en la región separatista georgiana de Osetia del Sur, en respuesta a presuntos tiroteos por parte del Ejército de Georgia.
at 20:19 ·



El siguiente Artículo fue publicado por Ciberpastor en su blog, lo reproduzco pues lo considero de suma importancia para el cuerpo de Cristo.


Les dejo este artículo que acabo de colocar en mi blog

Tiempos Peligrosos

Casi a dondequiera que uno vuelve la mirada ve señales de escasez, desastre y desesperación. Gracias a Dios que esa no es la actitud del creyente que anda de manera activa por fe. No debemos dejarnos llevar por las circunstancias, sino por la Palabra de Dios, y debemos fortalecernos en Él.

Hace unos días mi familia y yo comíamos en un restaurante cerca de la casa, y el dueño y yo hablábamos de estas cosas. Ella me contó que la gente que compra carne al por mayor en los almacenes se comporta como una turba descontrolada, y ella evita pasar con su carne entre esa gente. En condiciones normales, esa gente no se comporta de esa manera. Algunos de ellos son vecinos y amistades de nosotros. Lo que pasa es que han sucumbido a ese impulso de acaparar cosas; y eso no es otra cosa que codicia disfrazada: primero temor, luego acaparación, luego codicia, luego algo lamentable como meterse delante de alguien en la cola, y así sucesivamente. Esa clase de ambiente fomenta cosas tan deplorables como el mercado negro y toda clase de anarquía.

¿Qué podemos hacer? ¿Cómo podemos protegernos para que el maligno no nos toque? (Véase 1 Juan 5:18).

Lo primero que debemos recordar es que no somos de este mundo y que la escasez que en él hay no tiene que afectarnos. Nuestro Dios nos da lo que necesitamos conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Lo que debemos hacer es vigilar nuestra actitud en cuanto a dar.

Estamos en un tiempo en el que, en lugar de se acaparadores, debemos ser generosos no solo por nuestro bienestar propio, sino por el de los demás. Su testimonio como creyente que da generosamente y sin temor quizá sea lo que el Espíritu Santo necesita para romper esa actitud de acaparar que tiene la gente en su barrio.

Otra cosa que debemos hacer es guardarnos del temor. El temor es lo que da origen a ese tipo de codicia. Proverbios 4:23 nos dice que sobre todas las cosas, guardemos (o protejamos) nuestro corazón. Hace unas semanas, durante la reunión de oración del personal, el Espíritu Santo habló y nos dio instrucciones en cuanto a este tema.


A continuación se transcribe lo que Él dijo; léalo con mucha atención:



«Presten atención a estas palabras y recíbanlas como instrucciones, porque son palabras del don de sabiduría de parte del Dios Altísimo. A partir de ahora y hasta que Jesús vuelva será muy arriesgado pasar mucho tiempo viendo las noticias en la televisión, leyendo los periódicos y siguiendo los reportajes que se dan en los medios de comunicación del mundo. Repito: será muy arriesgado hacer estas cosas. Será muy arriesgado porque habrá tantas catástrofes y tantos cataclismos durante un tiempo tan corto que para la mente humana será imposible de asimilar.
Mentalmente, no podrán entender, descifrar, juzgar ni explicar las cosas que sucederán en la Tierra. Serán muchos los acontecimientos en muy poco tiempo, y será demasiado y hasta horrible, humanamente, para que alguien pueda entenderlo. Será conocido como El apogeo del mal presentador.
Será la mejor hora en la historia de la humanidad para transmitir malas noticias.
»Si se dejan llevar por estas cosas, le estarán dando lugar a la carne, y esta tendrá sus efectos nocivos en sus vidas. Mi Palabra dice que los corazones de los hombres desfallecerán por el temor y la expectación de las cosas que sucederán en la Tierra. Pongan mucha atención a estas palabras. Yo soy el que soy, dice el Señor Dios de los ejércitos. Si el mundo no tiene dinero, yo tengo mis medios. Si el mundo no tiene riqueza, yo tengo mis medios. Porque Yo soy el camino. Y donde no hay camino, Yo soy el camino -dice el Señor-.
»Óiganme bien. Estas no son palabras vanas y vacías. Óiganme bien. Búsquenme. Atiendan a mi voz y tendrán abundancia cuando en el mundo halla escasez. La gente los mirará y dirá: “¿De dónde les vienen esas cosas? ¿Cómo les llegan?”. Y ustedes podrán decir: “Nuestro Dios nos da todo lo que necesitamos conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”.
»Les doy mi Palabra -dice el Señor- de que cuando la situación en la Tierra sea tal que mi pueblo no pueda prevalecer, entonces Yo prevaleceré por la resurrección.
Yo los libraré de la boca del león [Este es el don de la palabra de sabiduría]. Esta es la sabiduría de Dios.
Óiganla. Obedézcanla. Denle la espalda a los pobres rudimentos del mundo. No busquen información en los medios que transmiten malas noticias. Busquen información en las buenas nuevas del Evangelio. No importa cuán mala esté la situación en el mundo, no los consumirá a ustedes -dice el Señor-, porque Yo acortaré el tiempo. No los consumirá a ustedes, ni tocará ninguno de sus cabellos; no perecerán, porque volveré por un Cuerpo glorioso, poderoso y firme.
Así será -dice el Señor-. Así será, porque ya casi está por cumplirse. Esto que les he dado es para todo el Cuerpo de Cristo».
Lo insto a que vuelva a leer esas palabras. Recuerde que Él dijo que le prestara mucha atención. Tome la decisión de responder por fe en lugar de hacerlo por temor.